El Programa de Apoyos para Personas con Discapacidad y/o Talentos o Capacidades Excepcionales y sus familias (PRADIF), adscrito a la Licenciatura en Educación Especial de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), celebra una década de trabajo ininterrumpido. Este espacio, fundado en 2015 por la profesora Libia Vélez y un grupo de estudiantes, se ha consolidado como un referente en inclusión social, educativa y mejora de la calidad de vida de las personas con discapacidad en la ciudad de Bogotá.
PRADIF ofrece servicios gratuitos basados en tres apoyos fundamentales:
- Apoyo a valoración Pedagógica: identifica capacidades y habilidades de niños y jóvenes mediante actividades pedagógicas, entregando informes con recomendaciones para familias y docentes.
- Apoyo a orientación Informativa: guía a las familias sobre programas y servicios públicos/privados en educación, salud, bienestar, trabajo y recreación en Bogotá, mediante rutas personalizadas.
- Apoyo Formativo: capacita a personas con discapacidad, familias, cuidadores, estudiantes y docentes en enfoque de derechos, educación inclusiva y prácticas pedagógicas innovadoras.
En su décimo aniversario, PRADIF presenta importantes avances, ya que tiene una nueva oficina, y tras su reubicación a las Salas Arturo Camargo, cuenta con espacios ampliados para talleres, atención familiar y trabajo interdisciplinar.
También está en una constante expansión académica, pues además de Educación Especial, ahora recibe estudiantes de Licenciatura en Matemáticas para prácticas profesionales. Próximamente se integrarán las licenciaturas en Biología y Educación Básica Primaria.
Solo en este semestre, atendió a 59 beneficiarios directos (28 entrevistas iniciales, 5 orientaciones informativas, 26 valoraciones pedagógicas y 12 participantes en el grupo formativo «Diferentes y Habilidosos»).
Adicionalmente, se integraron a esta atención a personas con discapacidad que hicieron parte de tres trabajos de grado de estudiantes que hacen sus prácticas en este programa. También, se está consolidando un grupo de niñas y niños entre los 4 y 8 años con discapacidad intelectual o Trastorno del Espectro Autista con los que harán las prácticas el próximo semestre estudiantes del convenio de doble titulación con la Universidad Distrital, específicamente con la Licenciatura en Educación Infantil de esta prestigiosa Institución aliada.
Libia Vélez Latorre, coordinadora de PRADIF, subraya su doble impacto:
Para la comunidad, pues ofrece servicios únicos como la valoración pedagógica (escasa en el sector público) y orienta a familias vulnerables que no pueden costear apoyos privados.
Por otra parte, para la UPN es un semillero de innovación educativa. Los trabajos de grado realizados aquí (más de 10 generaciones) han enriquecido la Licenciatura en Educación Especial y creado vínculos con otras dependencias (como la Biblioteca). Además, forma a docentes de todas las disciplinas en inclusión.
«Somos un puente entre la Universidad y la ciudad. Programas como nuestra Feria Anual de Servicios o las salidas de campo –como la reciente a Yaguará (Huila), donde realizamos 26 valoraciones pedagógicas– demuestran que la inclusión se construye en territorio», afirma Vélez.
La profesora Mary Luz Parra Gómez, miembro del equipo de trabajo del programa y docente de la Licenciatura en Educación Especial, destaca la relevancia del nuevo espacio: «Es un escenario de encuentro donde articulamos el trabajo con familias, jóvenes, estudiantes en formación y docentes. Aquí realizamos talleres, valoraciones y construimos laboratorios pedagógicos transdisciplinares». Además, enfatiza el valor formativo: «PRADIF transforma la visión de los futuros educadores. Les permite entender cómo enseñar a poblaciones con discapacidad intelectual o Trastorno del Espectro Autista, y desarrollar habilidades para la vida más allá del currículo tradicional», puntualiza.
La Educadora de Educadores sigue comprometida con una educación de excelencia e inclusiva que tenga en cuenta a todas las poblaciones e impacte en diversas poblaciones.